Este viernes, Alfredo Tralcal y los hermanos Pablo, Benito y Ariel Trangol, imputados bajo la Ley Antiterrorista por el llamado “caso iglesias”, cumplen 108 días en huelga de hambre sin obtener respuesta a sus demandas por marte del Ejecutivo.
Razón que llevó a que distintas organizaciones se manifestaran en ciudades como Temuco, Concepción, Santiago, Puerto Montt, Valdivia, Valparaíso y Neuquén, en Argentina, exigiendo un juicio justo sin la aplicación de la ley antiterrorista.
Luego de que un grupo de manifestantes se tomara la Catedral de Concepción, uno de los voceros de las familias de los huelguistas se reunió con el arzobispo Fernando Chomalí, quien señaló que ningún gobierno ha enfrentado con seriedad el problema de fondo que existe entre el Estado y el pueblo mapuche.
La autoridad eclesiástica indicó que no llamara a Carabineros a desalojar la toma porque se trata de una acción simbólica y se comprometió a generar un diálogo entre las autoridades del Gobierno y las familias de mapuche en huelga de hambre.
“Les garantice seguridad a las personas que están adentro de la iglesia. Llamaré al Intendente de la IX Región para que se comunique con quien corresponda con el fin de que se produzca un diálogo que soluciones este drama humano que es la huelga de hambre”, afirmó.
El arzobispo de Concepción también hizo un llamado a la Fiscalía para que agilice la investigación, ya que desde su perspectiva los procesos han sido muy largos, principalmente la prisión preventiva, que ya se extiende por más de un año.
Asimismo, la autoridad religiosa emplazó a las autoridades a hacerse cargo de las demandas del pueblo mapuche: “Lo que pasa en la Catedral es una gota frente al tema de fondo del pueblo mapuche, ahí es donde tiene que estar el foco. Es un pueblo que necesita más reconocimiento constitucional, necesita que se le respete más su cultura, hay un tema de tierras que no está resuelto, esos son los problemas de fondo y creo que llegó el momento de abordarlos con mayor seriedad“
Juan Carlos Tralcal, uno de los voceros de las familias, agradeció la acción de la iglesia y comunicó que las manifestaciones responden a la radicalización del movimiento en apoyo a los huelguistas. “Es una toma simbólica que tiene como principal objetivo romper el cerco comunicacional para hacer un llamado de atención y que la gente se acerque a apoyar a los peñis que están encarcelados en Temuco”.
Por su parte, la ministra Secretaria General de Gobierno, Paula Narváez, dijo que como autoridades se han preocupado “por la salud de las personas en huelga de hambre, quienes serán monitoreados”. Respecto de la demanda por la ley antiterrorista, agregó que “este caso está en sede judicial”.
De acuerdo al último informe entregado por el Colegio Médico, los comuneros presentan daños cognitivos, hepáticos y renales. Además de una fuerte baja de peso, desánimo y altos niveles de angustia.