En medio de la confirmación de que el proyecto de reducción laboral a 40 horas semanales se discutirá el próximo mes en la Sala de la Cámara de Diputados, el Departamento de Análisis Económico del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (CELAG) dio este martes un nuevo espaldarazo de los expertos al proyecto liderado por las diputadas comunistas Karol Cariola y Camila Vallejo.
Esto, porque el reconocido centro de estudios publicó una investigación sobre las consecuencias de la reducción de la jornada laboral en Chile a 40 horas semanales, en la que demuestran que la medida provocaría un crecimiento del Producto Interno Bruto hasta de un 2,1%, lo que supondría un incremento de cinco mil millones de dólares en la producción de bienes y servicios.’
Frente a esta nueva evidencia, la diputada Camila Vallejo sostuvo que servirá para refutar la que denominó como una “campaña del terror” por parte del Gobierno, en la que, afirmó, ha primado la desinformación y las cifras infundamentadas.
“Estos estudios nos sirven para contrarrestar la campaña del terror sobre el quiebre económico que, supuestamente, traerían las 40 horas”, dijo la parlamentaria. “Sabemos que eso no es así y estos estudios demuestran que incluso se avanzaría en mejorar las condiciones económicas del país, tanto del PIB per cápita, como la situación de empleabilidad”, añadió Vallejo.
Según el análisis de CELAG, la medida también tendría efectos positivos en la creación de empleo. Según las estimaciones del estudio, la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales supondría la creación de 37 mil nuevos puestos de trabajo.
Así, en conversación con Diario y Radio Universidad de Chile desde la ciudad de Buenos Aires, Argentina, el director del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica, Alfredo Serrano, aseguró que la aprobación de esta iniciativa de reducción de jornada sólo traería beneficios para el país.
“Desde nuestra perspectiva, con nuestros números encima de la mesa, incluso con la propia historia económica chilena, que así lo revisamos en el trabajo de investigación hecha, yo creo que sería una suerte de ganar-ganar-ganar“, aseguró Serrano a este medio.
“Ganarían los trabajadores en calidad de vida, en dignidad y sin tener ningún tipo de efecto perjudicial en materia de salarios y empleo, y también ganaría el modelo económico, en un momento en que además está necesitado, precisamente, de reactivar la economía”, señaló el director del centro internacional de estudios geopolíticos.
En este sentido, el análisis de CELAG refuta las predicciones del gobierno de Sebastián Piñera, que pronosticaba una destrucción de entre 250 y 350 mil empleos con la implantación de las 40 horas semanales, es decir, un descenso del 4,3 por ciento en la tasa de ocupación.
Sin embargo, el director del Centro de Estudios Latinoamericanos indicó que el Ejecutivo chileno minimiza el efecto de la redistribución de las rentas a los salarios sobre la demanda agregada, por lo cual sus cálculos no se ajustan a la realidad.
“Es extraño que en el modelo que utiliza el Gobierno de Piñera yo creo que asumen hipótesis que serían más propias de un experimento en la isla Robinson Crusoe, pero de poca credibilidad”, sostuvo el director de CELAG.
“Yo creo que ahí es donde está el gran tema de nuestro informe, de hecho hay varias páginas que se dedican a explicar por qué no serían creíbles dichas hipótesis asumidas por el gobierno de Piñera en sus estudios para intentar demostrar que tendría un efecto negativo en el crecimiento económico”, explicó Serrano.
“Además, iría en contra de la mayoría de la literatura del mundo y América Latina en esta materia, en que se demuestra que cualquier impacto de la reducción de jornada laboral siempre ha sido positivo en productividad, crecimiento y generación de empleo“, agregó.
En los últimos 20 años, la participación de los salarios en el PIB de Chile se ha ido reduciendo drásticamente, lastrando de esta forma el propio crecimiento de la economía. De esta forma, en estas dos décadas de contracción salarial se han perdido 250 mil millones de dólares, lo que supone unas pérdidas acumuladas de hasta 1,04 veces el PIB del país.
En el estudio del Departamento de Análisis Económico de CELAG participaron, como investigador principal, el economista ecuatoriano Nicolás Oliva, la economista argentina Lucía Converti, el sub director de CELAG, Guillermo Oglietti, y el director del centro, Alfredo Serrano.
En éste, se basaron en un modelo que considera el efecto dual de los salarios. Por una parte, las retribuciones a los trabajadores son un costo para las empresas, pero, a la vez, supone consumo de los trabajadores y demanda agregada. Así, se calculó el efecto neto de los salarios en el consumo, las exportaciones, los precios domésticos y las importaciones.
Revisa el estudio completo de CELAG aquí.