“Nadie me ha pedido algo semejante”, así respondió el presidente del partido socialista, Camilo Escalona, a las preguntas sobre una posible dimisión a su cargo, luego de los últimos resultados parlamentarios.

La tienda se transformó en una de las perdedoras de las elecciones parlamentarias, luego que varias de sus figuras emblemáticas, como los senadores Jaime Naranjo y Jaime Gazmuri, además del diputado Jorge Insunza no obtuvieran los votos necesarios para mantenerse en el cargo y que, como colectividad, sólo lograran un diez por ciento de las preferencias en las urnas.

Este resultado reavivó las presiones en contra del presidente socialista, cuyos oponentes endosan a él y su directiva parte importante de la responsabilidad en el resultado de estos comicios.

Uno de ellos es el diputado reelecto y una de las mayorías nacionales, Fidel Espinoza, quien ya en una oportunidad había pedido la renuncia a Escalona. El parlamentario calificó como una "debacle electoral" lo ocurrido este domingo, culpando al mando del partido por estos resultados.

En la misma línea, la diputada y ahora senadora electa, Isabel Allende, indicó que luego de la derrota parlamentaria, el partido y su directiva deben hacer una autocrítica al respecto.

Allende eso sí, agrega que este asunto se debe zanjar luego de la segunda vuelta presidencial, ya que hoy es prioritaria la unión en torno a Eduardo Frei,  más que las discusiones internas.

“Camilo va a tener que escuchar voces críticas que van a surgir el jueves. Yo tengo mi opinión y la formularé internamente en su momento. No es el minuto para hacer pasadas de cuentas que impliquen un daño mayor porque lo que hay que hacer como tarea prioritaria es cerrar filas en torno a la candidatura que tenemos”, dijo la congresista.

Por su parte el diputado Marcelo Díaz, afirmó que es la dirección la que debe responder por este resultado electoral y además criticó a la conducción del PS respecto del diseño de campaña, que – dijo – privilegió enfocarse en la elección presidencial que en la parlamentaria.

“Si bien, creo que el apoyo del PS a Frei tiene que ser claro e inequívoco, era posible ser más equilibrado en la estrategia y en la asignación de recursos para asegurar un resultado mucho más satisfactorio.  Más que responsabilidades individuales aquí hay un problema en la conducción del partido de larga data”, aseguró Díaz.

Los resultados de la última elección iban a ser uno de los temas obligados en la habitual reunión de la comisión política del PS, que se desarrolla cada lunes. Sin embargo, Camilo Escalona resolvió suspenderla, argumentando que lo hizo para que pudieran asistir todos los legisladores del partido.  Otras fuentes, eso sí, aseguran que lo hizo para intentar bajar la presión interna, por lo que el encuentro se realizaría este jueves.