Emovere
¿Qué es una emoción?, ¿es una estado del alma, de ánimo, una sensación física? Esas preguntas marcan Emovere, obra que une movimiento, sonido y tecnología para indagar en la naturaleza y subjetividad de la emoción.
La bailarina y coreógrafa Francisca Morand codirige junto al investigador y artista sonoro Javier Jaimovich. En escena los bailarines se mueven con un sensor en su muslo, dos en sus brazos y uno en su corazón. Sus señales de tensión muscular y ritmo cardiaco son codificadas y asociadas a objetos sonoros que se activan según sus particularidades. Luego, con un movimiento de su pierna pueden subir el volumen o modificar con un brazo la frecuencia del sonido. Pero no tienen el control absoluto, porque aunque siguen una coreografía, sus cuerpos siempre generan variaciones que se reflejan en el sonido, que a la vez afecta sus movimientos.