Algunos de los objetos que conforman Rosa porino, la instalación que la artista visual Elizabeth Burmann exhibe en Espacio Vilches UC, son un depósito de polvo, pilares cubiertos de linóleo, vidrios ahumados, autoadhesivos imitación granito y un televisor en el que se muestra un material plástico fundiéndose. Todos estos elementos han sido tratados con técnicas de deterioro, simulación y empastes para establecer una similitud con el “rosa porino”, un tipo de granito que se caracteriza por su color rosáceo.

La obra es una puesta en escena que transita entre el desecho, la decoración, lo orgánico e industrial. Toma como punto de partida el granito Rosa porino utilizado comúnmente para decorar encimeras de cocinas y baños, recepciones de oficinas u hoteles desde los años 20. El montaje propone el traslado de las propiedades de este granito, a través de la creación de un mobiliario híbrido, de objetos encontrados y una video instalación.