El presidente de la Corte Suprema expuso que se pretende “incorporar la perspectiva de género y derechos humanos en la resolución de los asuntos (…) particularmente en lo jurisdiccional, a través de herramientas que permitan a magistradas y magistrados considerar estos criterios, particularmente en la apreciación de la prueba, pues este conjunto han de facilitar la identificación de estereotipos que deben ser repelidos por el juzgador”.