Jordi Planas y Jordi Roig son dos ciudadanos catalanes, representantes de asambleas sociales que surgen en esta parte de España al alero del levantamiento global, propiciado en este país con los Indignados. No obstante, los dirigentes marcan una separación de un alzamiento surgido en Madrid. En Chile, destacan el rol de los jóvenes al margen de los partidos políticos, tomando las herramientas para una nueva etapa en la democracia.