Este año, la conmemoración del Día Internacional de la Mujer coincide con uno de los debates más polémicos de la administración de Michelle Bachelet: la despenalización parcial de la interrupción voluntaria del embarazo. Mientras grupos conservadores se han negado sistemáticamente a revertir la criminalización absoluta de esta práctica, organismos internacionales instan a poner fin a la vulneración de derechos que ello conlleva y la sociedad civil exige una legislación acorde a la realidad.