Negligencia, irregularidades y conflictos de interés. Ese fue el lapidario informe que prueba las inapropiadas conductas de las corredoras de bolsa en el caso La Polar. Privilegiaron sus propias carteras entregando información incorrecta a sus clientes, los pequeños inversionistas del bullado caso. El documento, presentado ante la Superintendencia de Valores y Seguros, plantea la necesidad de regulación en materia financiera en nuestro país.