En una carta dirigida a la Conferencia Episcopal, el Papa Francisco pidió perdón por su mala interpretación de los hechos y convocó a todos los obispos de Chile a Roma para dialogar sobre sus conclusiones. Víctimas valoraron el paso dado pero reconocieron que falta mucho por hacer.
El ex arzobispo de Santiago declaró por más de cinco horas en el contexto de la demanda civil presentada por las víctimas del párroco de El Bosque, insistiendo en no haber encubierto los abusos denunciados.