El cuerpo habría generado una energía un millón de veces superior a la de la mayor bomba nuclear jamás detonada provocado terremotos superiores a 10 en la escala Richter, así como el colapso de plataformas continentales, deslizamientos de tierra, corrimientos, movimientos en masa y maremotos. De esta forma, desestiman otra serie de teorías al respecto.