El cierre de uno de los dos penales exclusivos para militares condenados por violaciones a los derechos humanos fue valorado por agrupaciones de familiares de víctimas de la dictadura, las que, no obstante, exigen el cese de los beneficios para los victimarios. Sin embargo, los familiares de los reos criticaron fuertemente la “deslealtad” del Presidente Pilñera.