Irán acude a las urnas para decidir cuál de los candidatos autorizados por el régimen se convertirá en el nuevo presidente de la República Islámica. El pulso se juega entre tres representantes del sector conservador: el exjefe de la diplomacia Ali AkbaVelayati, el alcalde de Teherán Mohamad Bagher Ghalibaf y el jefe de las negociaciones nucleares Said Jalili, y un representante de los reformistas, el religioso Hasan Rohani.
El gobierno del país asiático asegura que tanto el mandatario como los oficiales que lo acompañaban se encuentran ilesos.