“El devastador número de niños que buscan asilo y seguridad en Europa es el resultado de decisiones políticas y de un sistema migratorio roto”, dijo la directora regional de UNICEF para Europa y Asia Central, Regina De Dominicis.
Desde 2014, más de 20 mil migrantes han muerto en el Mediterráneo, según la ONU. De ellos más de 16 mil en la zona entre Italia, Malta, Libia y Túnez. Solo un tercio de estos cuerpos sin vida han sido recuperados.