El viejo apotegma periodístico cobró total sentido este 31 de agosto de 2021: La fotografía en tétrico verdi-negro tomada con visor nocturno al último soldado estadounidense en abandonar Afganistán minutos antes de la medianoche del lunes 30, confirma que los dichos populares pueden convertirse en la visión sincopada de una realidad brutal.
Cuando el 30 de abril de 1975 el rápido avance del Vietcong colapsó las posiciones survietnamitas tomando por sorpresa a los occidentales que residían en Saigón, tuvo lugar una de las más desesperadas evacuaciones que se recuerden. Masivamente, diplomáticos y personal de apoyo de las embajadas de Estados Unidos y sus aliados, amén de extranjeros de distintas nacionalidades y sus colaboradores vietnamitas se hacinaron en las legaciones para huir de los comunistas. Hoy, en Kabul, Afganistán, la escena se repite: ahora se trata de escapar de los talibanes.