Las negociaciones que llevaron a un nuevo pacto con los bonistas produjeron un rápido efecto en las acciones que el país trasandino negocia en la Bolsa de Nueva York.
Esta decisión ocurre un día antes de la llegada a Buenos Aires de una misión del FMI para analizar la propuesta de reperfilamiento de deuda por 44 mil millones de dólares del gobierno del presidente Alberto Fernández.