Tres diques de contención se rompieron este viernes en una mina de la empresa Vale, en el estado brasileño de Minas Gerais, dejando hasta ahora un saldo de más de 40 fallecidos y casi 300 desparecidos.
En el sudeste del país, comunidades que han quedado completamente inundadas por las lluvias que han caído en las últimas dos semanas. La presidenta Dilma Rousseff visitará las zonas afectadas.