La trata de personas es una violación a los derechos humanos alentada por las profundas desigualdades sociales y económicas, que afecta principalmente a mujeres y niñas. Pese a los esfuerzos de los Estados, miles de personas continúan siendo engañadas y llevadas fuera de sus ciudades, siendo explotadas laboral o sexualmente por un mercado ilícito que produce ganancias de 32 billones de dólares al año.