Al menos cinco rieles habrían sido encontrados en las costas de Caldera, presumiblemente utilizados para hundir cuerpos de detenidos desaparecidos en el mar durante la dictadura. Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, valoró el hecho de “que cada cierto tiempo nos enfrentemos a este cuentagotas de la verdad, que nunca es la verdad total”, responsabilizando a las Fuerzas Armadas y su “pacto de silencio” por la impunidad que protege hasta el día de hoy a los asesinos.