La muestra, emplazada tanto en el interior como en la explanada del Centro Cultural, incluye obras de metal de hasta seis metros de altura, muchas de las cuales corresponden a estudios de esculturas monumentales que constituyen hitos urbanos en ciudades como Pekín, en China; Boston y Sausalito, en Estados Unidos; Calama, Talcahuano y Santiago, en Chile.
“Sergio Castillo: domador de metales” es el nombre de la exposición que se inaugura este miércoles 1 de julio en el Museo Nacional de Bellas Artes. Curada por Silvia Westermann, la muestra recorre la trayectoria del Premio Nacional de Arte (1997) presentando sus obras en cuatro categorías: “Animales”, “Abstractos”, “Eróticas” y “Políticas”.