Criticas generó la falta de comunicaciones efectivas entre la Onemi y las autoridades de Rapa Nui, luego del sismo de 7.2 grados que se produjo la noche de este miércoles, en el Océano Pacífico, y que no se sintió en la isla, neutralizando todo tipo de acción temprana frente a un posible Tsunami. El alcalde del lugar se enteró de la emergencia por medio de un llamado de la prensa.