El problema que veo no es tanto en qué lugar ponemos nuestra empatía y qué tan amplia es o qué tan mezquina, sino lo que hacemos con ella cuando todas esas personas que nos importan están vivas. Porque hay un tiempo para hacer las cosas y también una manera. ¿Qué tipo de unidad puede llegar a nacer de esta empatía que hoy, lamentablemente, suele expresarse demasiado tarde? Y quizás también, ¿demasiado a solas?