Luego de cuatro años de arduas negociaciones, este lunes las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno de Colombia firmaron el acuerdo de paz que pone fin a 52 años de conflicto armado.
Cartagena de Indias fue el escenario que cobijó a las máximas autoridades del Ejecutivo colombiano, encabezados por el presidente Juan Manuel Santos, y de las FARC lideradas por Rodrigo Londoño, alias Timochenko, quienes en frente de 15 jefes de Estado, más la presencia del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon y 2 mil 500 invitados entre las que se contaban víctimas del conflicto y guerrilleros, sellaron con sus firmas el acuerdo que ahora deberá ser ratificado por el pueblo colombiano, en un plebiscito el próximo 2 de octubre.
El primero en hacer uso de la palabra fue “Timochenko”, quien pidió perdón al pueblo colombiano: “En nombre de las FARC-EP ofrezco sinceramente perdón a todas las víctimas del conflicto, por todo el dolor que hayamos podido causar en esta guerra”. Luego, agradeció a quienes oficiaron como mediadores en las conversaciones de paz.
“Vamos a hacia la política sin armas, preparémonos todos para desarmar las mentes y los corazones. Lo escrito en papel va cobrar vida en la realidad y para que esto sea posible, además de la verificación internacional, el pueblo colombiano debe convertirse en el principal garante de lo pactado, nosotros vamos a cumplir y esperamos que el gobierno cumpla”, agregó el líder de las FARC.
“Que dios bendiga a Colombia”, fueron las palabras finales de Londoño, al terminar su alocución.
Luego fue el turno del presidente Santos, quien señaló que Colombia estaba cansada de la guerra y la violencia, y este acuerdo viene a poner fin al conflicto, a su juicio.
“Lo que firmamos hoy es una declaración del pueblo colombiano ante el mundo de que nos cansamos de la guerra, de que no aceptamos la violencia como medio para defender las ideas. De que decimos ¡No más guerra!”.
Posteriormente, dirigiéndose al líder guerrillero, enfatizó en el proceso de desmovilización de las FARC, que ahora se transformarán en un movimiento político, y los invitó a defender sus ideas “sin armas” y “siguiendo las reglas de la justicia”.
“Señor Rodrigo Londoño y miembros de las FARC: hoy, cuando emprenden su camino de regreso a la sociedad; cuando comienzan su tránsito a convertirse en un movimiento político, sin armas; siguiendo las reglas de justicia, verdad y reparación contenidas en el Acuerdo, como Jefe de Estado, de la patria que todos amamos, les doy la bienvenida a la democracia”.
Santos hizo un llamado al pueblo de Colombia a que ratifiquen este acuerdo, votando por el sí el próximo 2 de octubre: “Con su voto podremos dejar atrás un pasado triste y abrirle las puertas a un futuro mejor, con alegría y optimismo”.
Ban-Ki moon, secretario general de la ONU, expresó en su discurso en inglés a los firmantes del acuerdo que ahora “pueden mirar el futuro con mucho optimismo, ustedes están invitando a los colombianos a que pasen un futuro en paz”.
“Viva Colombia en paz”, culminó el líder de la ONU.