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Dirigentes sindicales creen que no existe voluntad política del Ejecutivo para retomar la iniciativa, por lo que exigen urgencia en su despacho. Aseguran que esta legislación habría impedido los miles de despidos que se registraron durante 2009.

 

 

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Proyecto de ley de negociación colectiva

La deuda de Bachelet con los trabajadores

Dirigentes sindicales creen que no existe voluntad política del Ejecutivo para retomar la iniciativa, por lo que exigen urgencia en su despacho. Aseguran que esta legislación habría impedido los miles de despidos que se registraron durante 2009.

 

 

Raúl Martínez

  Miércoles 16 de septiembre 2009 22:07 hrs. 
Radio-Uchile

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Hace seis meses que la ministra del Trabajo, Claudia Serrano, anunció el envío al Congreso del proyecto de negociación colectiva. La Presidenta Michelle Bachelet se comprometió con la Central Unitaria de Trabajadores durante su campaña a apoyar la iniciativa, pero esta aún no ve la luz.

El líder de la CUT, Arturo Martínez, afirma que hay dos responsables en este retraso: el empresariado y los altos niveles de popularidad de la Mandataria. “El gobierno, con ese apoyo del 72 por ciento de la ciudadanía, cree que ya no tiene nada más que hacer, y ha dejado postergados los temas de fondo, como el de la estructura laboral chilena, y que son urgentes de resolver. Hay un aprovechamiento de ese apoyo, porque si hubiera sido distinto, estoy seguro que el gobierno no estaría en la situación de pasividad que está con respecto al tema laboral”, aseguró.

Entre los parlamentarios concertacioinistas la situación causa extrañeza. Para el diputado PS, Tucapel Jiménez, integrante de la comisión de Trabajo de la Cámara Baja, "este es un anuncio que ha hecho la Presidenta de la República, este año y el año pasado, está dentro de su programa de gobierno. Yo me he enterado a través de la prensa, en reiteradas oportunidades, que el proyecto está listo, que en cualquier momento va a ser ingresado al Parlamento. Nosotros estamos a la espera y muy ansiosos, porque al aprobarse podríamos evitar muchas injusticias en Chile  contra los trabajadores”, expresó.

Las informaciones hablan de que la iniciativa está en condiciones de ser despachada, aunque no contendría demandas fundamentales del mundo laboral, entre ellas, el fortalecimiento de la sindicalización en organizaciones por rama de la producción y no por empresa.

Así lo explicó el coordinador de la Federación Sindical Mundial en Chile, José Ortiz. “Lo que trae es que jibariza a los sindicatos y los lleva a la negociación por empresa, y al sindicato ramal prácticamente lo destruye. Incluso le da, en una parte, la potestad al empresario para que nombre a los dirigentes sindicales interempresas, lo que es una locura. Desde ese punto de vista, no  creemos que este sea un proyecto posible de analizar en esta legislatura”, explicó.

En Chile, menos del 10 por ciento de la fuerza de trabajo está afiliada a un sindicato. De ellos, un porcentaje también inferior al 10 por ciento negocia colectivamente sus condiciones laborales con los empleadores.

Arturo Martínez asegura que si se hubiera contado con una normativa legal, como la que espera sea despachada al Parlamento, se podrían haber evitado los miles de despidos registrados en los primeros meses de 2009, y que fueron justificados por los empresarios por la  crisis económica.

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