Cinco muertos y varios heridos fue el saldo de este simulacro que además contó con personal médico para la atención de urgencia a cargo de los treinta alumnos de primer año de la carrera de Técnico Superior en Enfermería.
Tal fue el nivel de realismo de este ejercicio de salvataje que incluso llegó al lugar una ambulancia. Según la profesora a cargo de la actividad, Isola Yáñez, la idea fue acercar lo más posible a los estudiantes a una experiencia real.
La simulación consistió en que los propios estudiantes escogieran el papel que iban a desempeñar: algunos fueron víctimas, incluso fallecidas, y otros representaron al personal médico de urgencia. Las víctimas se maquillaron heridas expuestas lesiones en las extremidades y abdominales, daño en la cabeza y la cara, entre otras heridas de diversa consideración.
Por su parte, los asistentes de enfermería, también simulados, llegaron al supuesto lugar del accidente, en Avenida Marina, frente a las dependencias del CFT y en un trabajo de triage clasificaron a los pacientes, dando prioridad en la atención a aquéllos que podrían empeorar su diagnóstico por la demora en la atención. Para esto, todos debieron utilizar los conocimientos adquiridos desde que iniciaron sus estudios.
La profesora Yáñez se manifestó muy satisfecha con el resultado del trabajo, lo mismo que los estudiantes que participaron del simulacro, quienes coincidieron en destacar que el aprendizaje es muy efectivo.