Delegados del Presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, y del gobierno de facto abrieron hoy un diálogo, supervisado por la OEA y bajo fuerte custodia militar.
Militares custodian las calles en torno al hotel de Tegucigalpa donde se desarrolla la reunión, y piquetes antimotines reprimieron una manifestación de zelayistas cerca de la embajada de Brasil, donde el depuesto Mandatario permanece refugiado.
El Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, cinco cancilleres, el subsecretario de Estado norteamericano para América Latina, Thomas Shannon, y otros cuatro vicecancilleres instalaron la mesa de diálogo a las 12:20 horas locales (14:20 horas de Chile) en un hotel de la capital.
