Más de diez mil civiles han sido muertos en Río de Janeiro en supuestos enfrentamientos armados con la policía entre 1995 y 2007, en el marco de la "guerra" contra el narcotráfico en las favelas de la ciudad brasileña, reveló el estudio de una organización no gubernamental.
El informe del Instituto de Estudios de la Religión brasileño, cuyo autor es el sociólogo Ignacio Cano, denuncia que los premios financieros concedidos por las autoridades de Río a los agentes que se destacaran por "acciones de coraje" estimuló la práctica policial de asesinar a sospechosos.
Desde ese entonces, el índice de mortalidad en operativos policiales saltó de 1,7 a 3,5 casos fatales por cada persona herida.