A pocas semanas de la segunda vuelta electoral, los abanderados intentan leer todas las señales que arrojó la primera instancia de votaciones y enmendar rápidamente los errores.
En este contexto, el candidato de la Concertación, Eduardo Frei, se desmarcó de las dirigencias de los partidos de su bloque y realizó un urgente llamado a renovarse. De esta manera, el presidenciable acogió una de las principales demandas de Marco Enríquez Ominami para sentarse a la mesa a conversar sobre un eventual respaldo en el balotaje.
Eduardo Frei agregó además que su eventual gobierno los cargos serán “para los que tienen méritos y no para los que tienen contactos”. En este sentido, aclaró que la composición de su gabinete se basaría en criterios de paridad, experiencia, juventud, pero no necesariamente de militancia política de sus miembros.
Sin embargo, la gran sorpresa la dieron los presidentes de las colectividades oficialistas, quienes lejos de cuestionar la postura de Frei, avalaron su decisión.
Tanto Juan Carlos Latorre de la Democracia Cristiana como José Antonio Gómez del Partido Radical se mostraron abiertos a aceptar los términos que plantea Frei de cara a un nuevo periodo de elecciones.
"Mostrar nuestra disposición a una verdadera renovación de la política conlleva también nuestra plena aceptación de entregarle al candidato presidencial la más absoluta libertad. Nos parece saludable para el país que (Frei) tenga plena libertad como militante de la Democracia Cristiana para asumir con un criterio suprapartidario los compromisos que estime debe conformarse su futuro gobierno", comentó Latorre.
Por su parte, el líder del PPD, Pepe Auth mantuvo su autocrítica respecto del rol que han jugado los partidos durante la campaña e indicó que “la Concertación cometió el error de apresurar burocráticamente la designación de nuestro candidato, en lugar de procesarlo democráticamente”.
Uno de los que salió más vapuleado en todo este proceso fue el presidente del Partido Socialista, Camilo Escalona, pero a través de un comunicado señaló que “es esencial que Eduardo Frei cuente con toda la libertad y autonomía en sus decisiones. Así ha sido para construir su comando de campaña y así esperamos que sea como futura cabeza del país”.
Tampoco quedó fuera de la polémica el candidato de la Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, quién comentó que “aprecio los mea culpa, pero los chilenos queremos mucho más que eso. Frei ya fue Presidente, tuvo su oportunidad y no hizo un buen gobierno”.
Con estos coqueteos hacia la renovación de los rostros de la política Frei espera reforzar su posición en la segunda vuelta electoral ya que, como él mismo aseguró, “si la Concertación ha obtenido menos votos no es porque la gente prefiera otra alternativa, sino porque está molesta con las prácticas políticas que deben superarse en el próximo tiempo".