El gobierno de Estados Unidos presentó una demanda para impugnar la constitucionalidad de la ley de Arizona que criminaliza a los inmigrantes indocumentados, situación que fue recibida con beneplácito por parte de activistas locales de derechos humanos.
A través del Departamento de Justicia, se entabló la querella en el Tribunal de Distrito en Phoenix porque representa una usurpación de las funciones de la autoridad federal.
La ley, que prevé que policías locales y estatales interroguen e incluso arresten indocumentados durante la aplicación de otras leyes, como revisiones de tránsito, está contemplada que entre en vigor a finales del mes.
Activistas y ONG´s locales y nacionales han criticado la pieza de legislación pues, pese a ser enmendada, no le resta el poder a la policía para confirmar la residencia legal en el país.
Para ellos significa que la policía pedirá la documentación migratoria a “quien se parezca a un inmigrante indocumentado”, que, por lo general, recae en la apariencia de un hispano.
El gobierno de Estados Unidos presentó una demanda para impugnar la constitucionalidad de la ley de Arizona que criminaliza a los inmigrantes indocumentados, situación que fue recibida con beneplácito por parte de activistas locales de derechos humanos.
A través del Departamento de Justicia, se entabló la querella en el Tribunal de Distrito en Phoenix porque representa una usurpación de las funciones de la autoridad federal.
La ley, que prevé que policías locales y estatales interroguen e incluso arresten indocumentados durante la aplicación de otras leyes, como revisiones de tránsito, está contemplada que entre en vigor a finales del mes.
Activistas y ONG´s locales y nacionales han criticado la pieza de legislación pues, pese a ser enmendada, no le resta el poder a la policía para confirmar la residencia legal en el país.
Para ellos significa que la policía pedirá la documentación migratoria a “quien se parezca a un inmigrante indocumentado”, que, por lo general, recae en la apariencia de un hispano.
El gobierno de Estados Unidos presentó una demanda para impugnar la constitucionalidad de la ley de Arizona que criminaliza a los inmigrantes indocumentados, situación que fue recibida con beneplácito por parte de activistas locales de derechos humanos.
A través del Departamento de Justicia, se entabló la querella en el Tribunal de Distrito en Phoenix porque representa una usurpación de las funciones de la autoridad federal.
La ley, que prevé que policías locales y estatales interroguen e incluso arresten indocumentados durante la aplicación de otras leyes, como revisiones de tránsito, está contemplada que entre en vigor a finales del mes.
Activistas y ONG´s locales y nacionales han criticado la pieza de legislación pues, pese a ser enmendada, no le resta el poder a la policía para confirmar la residencia legal en el país.
Para ellos significa que la policía pedirá la documentación migratoria a “quien se parezca a un inmigrante indocumentado”, que, por lo general, recae en la apariencia de un hispano.
