El sindicato único de trabajadores de la Universidad de las Artes, Ciencia y Comunicación (Uniacc), denunció el despido de más de 55 trabajadores, debido a conflictos administrativos generados después del escándalo por el abuso en la entrega de las becas Valech.
Los manifestantes acusan una persecución al gremio, así como también la aplicación de prácticas anti-sindicales, ya que no se habría respetado el fuero sindical al momento de despedir.
“Nosotros somos un sindicato muy joven. Si no echan 36 socios… No creemos las razones de estos despidos, que están enmarcados en la excelencia académica. Ellos dicen ‘clases mundiales’ ¿Clases mundiales para qué? ¿Para despedir?”, criticó Jesús Leiva, el presidente del Sindicato.
Los manifestantes indicaron que estas desvinculaciones tendrían su origen en la reforma administrativa que sufrió la UNIACC después del escándalo de las becas Valech y al predominio de criterios economicistas en la gestión.
En este sentido, recibieron el respaldo de distintas agrupaciones del ámbito, como la Federación Nacional de Trabajadores de la Educación Superior (FENATRAES), la Federación de Universidades Privadas de Chile y diversas organizaciones de alumnos de ésta y otras casas de estudio.
La CUT también se hizo presente. La encargada de Derechos Humanos, María Eugenia Puelma, llamó a denunciar estos abusos y rechazó el modelo de educación superior que impera en este momento en Chile.
“Si la educación superior está basada en un negocio, todos nosotros no somos más que un objeto prescindible. Hoy día estamos, mañana no estamos. Eso es lo que ha ocurrido durante estos años en los que se ha fomentado la educación superior como un negocio. Hoy serán los auxiliares, mañana no sabremos quiénes serán porque el proceso de externalización es así, se empieza por el más chico. Hay que denunciar estos hechos. Hay que ir donde el ministro de Educación, que dice que tiene una gran propuesta para la educación superior ¡¿Esta es la propuesta?!”.
La principal demanda de los trabajadores es que reintegre a los funcionarios despedidos y que se abra el diálogo para transparentar las decisiones que afectan a toda la comunidad universitaria.