No solo un reajuste salarial es el que están debatiendo los funcionarios del Estado con el Gobierno, que hizo una primera oferta que alcanza el 3,7%, frente al 8,9% que piden los dirigentes reunidos en la mesa del sector público.

Y es que durante este año luego que asumiera la administración de Sebastián Piñera, son 3 mil los empleados fiscales despedidos de sus labores en diferentes reparticiones públicas, incluyendo ministerios y otros servicios.

Frente al tema del reajuste, el presidente de la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF), Raúl de la Puente, sostuvo que la propuesta del Ejecutivo en la realidad les otorga un aumento del 0,6%, que cambia la fórmula para calcular el incremento de los salarios para el sector.

“Este Gobierno ha cambiado los criterios de negociación, que siempre se hacían sobre el IPC y el crecimiento económico. Por eso estamos pidiendo un 8,9%, pensando en un IPC de 3 y algo por ciento y un crecimiento de 6%. Pero el Gobierno ha dicho que están ofreciendo esto en base al crecimiento de las remuneraciones de todo el sector privado

De la Puente reclama que no se puede comparar al sector privado del país ya que ahí sólo negocia el 5,7 por ciento de los trabajadores, los que de todas formas consiguen en promedio un reajuste salarial del 8 por ciento, distante del 3,7 propuesto por el Gobierno.

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