Más del cincuenta por ciento de los microbuses del troncal 4 del Transantiago están en paro de actividades debido a que la empresa operadora no estaría cumpliendo con la jornada laboral establecida en la ley y con las condiciones adecuadas para un buen desempeño de los choferes.
A través de un comunicado, Express S.A. respondió calificando de ilegal la manifestación, pues aseguran cumplir con las exigencias de extensión de jornada, descanso e higiene.
Sin embargo, son alrededor de ochocientos trabajadores los que protestan por las malas condiciones laborales. Estos son del patio María Angélica de Peñalolén; del patio ENEA de Pudahuel, donde se encuentran más de doscientos conductores parados en un depósito que cuenta con 250 máquinas; y en el patio Lo Echevers del sector Renca y Quilicura, donde salieron sólo catorce de más de cien máquinas.
Raúl Seguel, trabajador del depósito ENEA y secretario de la Confederación Nacional Unitaria de Trabajadores del Transporte (Conutt) señaló que la decisión se tomó “en conjunto con varias organizaciones sindicales, de hacer un retraso de actividades por lo menos dos al día, y si la empresa no llega a instalar una mesa interministerial con Transportes y Trabajo, nosotros vamos a seguir con nuestra protestas”
El dirigente afirmó que sólo quieren que se cumplan sus derechos laborales. “Eso está enmarcado en el Código del Trabajo, no estamos pidiendo nada que no esté dentro de los márgenes legales”, planteó Seguel.
Hace ya varios meses que los distintos sindicatos estaban en negociaciones con Express S.A., pero sólo llegaron a buen puerto con aquellos más afines a la empresa, ante eso varias organizaciones sindicales se han agrupado en el Movimiento Organizado de Pudahuel Unido (MOPU), cuyos voceros han negociado con la empresa sin lograr el cumplimiento de sus demandas.
“No se está respetando la ley y los descansos entre turno y turno: terminamos a las tres de la mañana y a la una de la tarde (tenemos que estar) acá en el depósito de nuevo. La empresa no respeta la ley, menos nos da las condiciones básicas como corresponde, es por eso que estamos acá. Recalcarle a la gente que no estamos peleando dinero sino que condiciones laborales dignas y mínimas”, manifestó Juan Cárdenas, vocero de la agrupación.
El Troncal 4 atraviesa Santiago de poniente a oriente, lo que está afectando a los 750 mil usuarios que diariamente se trasladan por los diferentes recorridos que unen 23 comunas de Santiago.
De hecho, frente a la disminución de los buses, esta mañana un grupo de pasajeros bloqueó la avenida Apoquindo, en la comuna de Las Condes, generando un gran atochamiento vehicular. Se trató de una nueva manifestación espontánea de los usuarios del Transantiago que protestan por las deficiencias del servicio bajando a la calle a esperar la micro.
Otro problema para el gobierno que se podría agudizar con un posible paro de los sindicatos de las empresas Subus y Alsacia, mientras los ministros del Trabajo, Evelyn Matthei, y del Transporte, Pedro Errázuriz, no se sientan en una mesa junto a los trabajadores.
Este conflicto se suma a las demandas de los transportistas ante la apertura a concurso de los recorridos alimentadores en octubre próximo, lo que producirá grandes conflictos. Los trabajadores piden que el gobierno se adelante y asegure continuidad en los beneficios o bien el pago debido de indemnizaciones en caso de que haya modificaciones en las empresas operadoras.