El Club Providencia de avenida Pocuro recibió a 200 invitados a la cena homenaje a Miguel Krassnoff, brigadier del Ejército condenado a 144 años de cárcel en penal Punta Peuco por crímenes de lesa humanidad, realizados durante la dictadura de Augusto Pinochet, al alero del trabajo de la Dirección de Inteligencia Nacional (Dina).

El acto, convocado por el alcalde de la comuna, Cristián Labbé, contó con una manifestación a la que llegaron cerca de 500 personas, una “funa” que reunió a familiares de detenidos desaparecidos, además de vecinos de Providencia que repudiaban el accionar del edil y el tributo a uno de los mayores criminales de la dictadura en Chile.

Al cierre de la jornada, el edil de Providencia declaró no sentirse arrepentido por la convocatoria a este acto. Respecto a la “funa”, declaró que “fue una muestra de un estado de intolerancia en el que no se respetan los mínimos derechos de libre expresión y de reunión”. Respecto a la represión, Labbé declaró que “Carabineros tuvo una actitud prudente que fue de menos a más”.

No es primer homenaje
Alfonso Márquez de la Plata, ex ministro de Pinochet y editor del libro “Miguel Krassnoff, prisionero por servir a la Patria”, cuya cuarta edición era el motivo de la reunión de anoche, declaró que el tributo exige la inocencia de Krassnoff, y que la “funa” responde a presiones políticas contra el alcalde, ya que el libro fue lanzado sin incidentes hace cuatro años.

“La posición nuestra es que él está injustamente castigado, esta cosa debe revisarse, debe verse y por eso estamos haciendo esto. Me parece que todo esto es una cosa por traerle problemas al alcalde Labbé, porque hace cuatro años atrás, cuando se lanzó el libro, se lanzó en un local de la municipalidad de Providencia, e invitaba en alcalde Labbé”, sostuvo Márquez.

Presentan denuncia contra municipio
Horas antes del acto, la Fiscalía de Ñuñoa recibió una denuncia por vejación injusta a particulares, la que reúne a cerca de 800 vecinos que, agrupados a través de redes sociales, manifestaron su rechazo al actuar del alcalde Labbé.

El candidato al sillón municipal, el socialista Javier Insulza, encabezó la acción judicial en contra del edil de Providencia, y declaró que “este acto al que invitó el alcalde, es un acto que trae violencia, esta denuncia busca que el fiscal intente paralizar el acto. Si no se puede paralizar, que se tomen las medidas disciplinarias correspondientes, incluso pueden llegar a suspensiones del alcalde en sus funciones por incitar a través de un homenaje a autores de vejación de personas, con eso está incitando a la violencia”.

Pacífica “funa” termina con amplio operativo policial
Cerca de las 17 horas empezaron a llegar los invitados a la cena. A las 19 horas, medio millar de personas protestaba pacíficamente afuera del Club Providencia. El comienzo de la cita se vio retrasado, luego que Carabineros informara de un aviso de bomba al interior del recinto deportivo, retrasando la ceremonia en media hora.

La cita contemplaba un discurso del columnista Hermógenes Pérez de Arce, además de palabras del abogado Carlos Portales, y una carta enviada desde el penal Punta Peuco del propio Miguel Krassnoff. Se permitió el ingreso de algunos medios de comunicación, situación que no ocurrió con Radio Universidad de Chile.

En las afueras, los manifestantes se enfrentaban con grupos pinochetistas que llegaron a apoyar a Krassnoff. La extrema tensión de la funa pasó a la represión policial, luego que Carabineros usara bombas lacrimógenas y carros lanzaaguas para dispersar a los manifestantes.

Mireya García, secretaria general de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, condenó el actuar de Labbé como funcionario público municipal, y subrayó que “el alcalde Labbé no tiene derecho a encabezar una ceremonia de esta naturaleza, por ser electo por votación popular, y tiene que representar a todos los vecinos de Providencia. Labbé no puede seguir siendo alcalde, no puede ser el representante de una comunidad del momento en que se puso del lado de los criminales”.

La jornada registró violentos incidentes de Carabineros hacia los protestantes, quienes se manifestaron en forma pacífica y a rostro descubierto. Decenas de mujeres fueron golpeadas por efectivos policiales, además de una bomba lacrimógena dirigida contra una mujer desmayada. Incluso se informó de funcionarios policiales que desenfundaron sus armas de servicio.