Veintinueve civiles y soldados muertos en nuevos actos de violencia en Siria
Las protestas en Siria entran el jueves en su décimo mes de existencia, y los militantes pro democracia continúan buscando hacer escuchar su voz con un movimiento de desobediencia civil, a pesar de la violencia cotidiana, que este miércoles dejó un saldo de 29 personas muertas.
Miércoles 14 de diciembre 2011 15:52 hrs.
Ocho soldados murieron en la provincia de Hama (centro), en un ataque conducido por desertores contra cuatro camionetas del ejército regular a la entrada de la villa de Acharna, informó la entidad opositora Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El ataque fue una respuesta a la muerte, ocurrida poco antes, de varios civiles acribillados a balazos por las fuerzas de seguridad cuando se desplazaban en su automóvil a la localidad de Khatab, en la provincia de Hama, de acuerdo con el OSDH.
“Veintiún civiles murieron por las balas de las fuerzas militares y de seguridad, once de ellos en la región de Hama”, 210 km al norte de Damasco, aseguró el OSDH.
Ya el martes, al menos 23 civiles murieron víctimas de disparos de las fuerzas gubernamentales y siete miembros de los cuerpos de seguridad fueron abatidos por desertores en represalia, en la localidad de Idleb (nordeste), según el OSDH.
En el sur del país, tres desertores resultaron heridos en Lujat, una villa en la provincia de Deraa, una de las cunas de las protestas, durante choques con tropas oficiales.
En esa misma provincia “se escuchaban disparos en Hirak, una ciudad que en la mañana fue tomada de asalto por fuerzas oficiales con soporte de vehículos pesados para transporte de tropas”, informó la misma entidad.
En las proximidades de la capital, Damasco, las comunicaciones telefónicas habían sido cortadas desde la madrugada en Duma, mientras que se registraban fuertes tiroteos cerca de la sede de la Seguridad del Estado, a unos 20 kilómetros de la capital.
En una localidad vecina, Haraste, las fuerzas de seguridad arrestaron a varias personas.
Una vez más, los actos de violencia en Siria afectaron al vecino Líbano. Dos personas resultaron heridas por los disparos de una patrulla militar siria que entró a territorio libanés, próximo a la ciudad fronteriza de Khirbet Daud, dijo un funcionario libanés.
Entre tanto, la huelga convocada el domingo por militantes contrarios al régimen continuaba en Deraa, Homs, Hama, Idleb y Duma, informaron militantes locales.
En la red social Facebook, los militantes llamaron a los sirios a mantener el movimiento de desobediencia civil lanzado la semana pasada para aumentar la presión sobre el régimen de Bashar al Asad.
“La segunda etapa comenzó, vamos a cerrar nuestros teléfonos móviles durante cuatro horas en la tarde, bloquear las calles e ir a trabajar pero sin realmente trabajar”, publicó un militante para “cortar los medios financieros del régimen”.
“En Deraa, la huelga se mantiene por cuarto día consecutivo”, afirmó un militante a la AFP.
El Consejo Nacional Sirio (CNS), que reagrupa a la mayoría de las corrientes de oposición, formuló un nuevo llamamiento a la comunidad internacional a proteger a la población civil ante la violenta represión que según la ONU ya dejó un saldo de más de 5.000 muertos desde el mes de marzo.
“Los miembros del Consejo de Seguridad deberían discutir diferentes medios para proteger a los civiles. Deberían encontrar nuevos medios de hacerlo”, apuntó el portavoz del CNS, Basma Kodmani, en el sitio web del frente opositor.
Ocho soldados murieron en la provincia de Hama (centro), en un ataque conducido por desertores contra cuatro camionetas del ejército regular a la entrada de la villa de Acharna, informó la entidad opositora Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El ataque fue una respuesta a la muerte, ocurrida poco antes, de varios civiles acribillados a balazos por las fuerzas de seguridad cuando se desplazaban en su automóvil a la localidad de Khatab, en la provincia de Hama, de acuerdo con el OSDH.
“Veintiún civiles murieron por las balas de las fuerzas militares y de seguridad, once de ellos en la región de Hama”, 210 km al norte de Damasco, aseguró el OSDH.
Ya el martes, al menos 23 civiles murieron víctimas de disparos de las fuerzas gubernamentales y siete miembros de los cuerpos de seguridad fueron abatidos por desertores en represalia, en la localidad de Idleb (nordeste), según el OSDH.
En el sur del país, tres desertores resultaron heridos en Lujat, una villa en la provincia de Deraa, una de las cunas de las protestas, durante choques con tropas oficiales.
En esa misma provincia “se escuchaban disparos en Hirak, una ciudad que en la mañana fue tomada de asalto por fuerzas oficiales con soporte de vehículos pesados para transporte de tropas”, informó la misma entidad.
En las proximidades de la capital, Damasco, las comunicaciones telefónicas habían sido cortadas desde la madrugada en Duma, mientras que se registraban fuertes tiroteos cerca de la sede de la Seguridad del Estado, a unos 20 kilómetros de la capital.
En una localidad vecina, Haraste, las fuerzas de seguridad arrestaron a varias personas.
Una vez más, los actos de violencia en Siria afectaron al vecino Líbano. Dos personas resultaron heridas por los disparos de una patrulla militar siria que entró a territorio libanés, próximo a la ciudad fronteriza de Khirbet Daud, dijo un funcionario libanés.
Entre tanto, la huelga convocada el domingo por militantes contrarios al régimen continuaba en Deraa, Homs, Hama, Idleb y Duma, informaron militantes locales.
En la red social Facebook, los militantes llamaron a los sirios a mantener el movimiento de desobediencia civil lanzado la semana pasada para aumentar la presión sobre el régimen de Bashar al Asad.
“La segunda etapa comenzó, vamos a cerrar nuestros teléfonos móviles durante cuatro horas en la tarde, bloquear las calles e ir a trabajar pero sin realmente trabajar”, publicó un militante para “cortar los medios financieros del régimen”.
“En Deraa, la huelga se mantiene por cuarto día consecutivo”, afirmó un militante a la AFP.
El Consejo Nacional Sirio (CNS), que reagrupa a la mayoría de las corrientes de oposición, formuló un nuevo llamamiento a la comunidad internacional a proteger a la población civil ante la violenta represión que según la ONU ya dejó un saldo de más de 5.000 muertos desde el mes de marzo.
“Los miembros del Consejo de Seguridad deberían discutir diferentes medios para proteger a los civiles. Deberían encontrar nuevos medios de hacerlo”, apuntó el portavoz del CNS, Basma Kodmani, en el sitio web del frente opositor.
Ocho soldados murieron en la provincia de Hama (centro), en un ataque conducido por desertores contra cuatro camionetas del ejército regular a la entrada de la villa de Acharna, informó la entidad opositora Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
El ataque fue una respuesta a la muerte, ocurrida poco antes, de varios civiles acribillados a balazos por las fuerzas de seguridad cuando se desplazaban en su automóvil a la localidad de Khatab, en la provincia de Hama, de acuerdo con el OSDH.
“Veintiún civiles murieron por las balas de las fuerzas militares y de seguridad, once de ellos en la región de Hama”, 210 km al norte de Damasco, aseguró el OSDH.
Ya el martes, al menos 23 civiles murieron víctimas de disparos de las fuerzas gubernamentales y siete miembros de los cuerpos de seguridad fueron abatidos por desertores en represalia, en la localidad de Idleb (nordeste), según el OSDH.
En el sur del país, tres desertores resultaron heridos en Lujat, una villa en la provincia de Deraa, una de las cunas de las protestas, durante choques con tropas oficiales.
En esa misma provincia “se escuchaban disparos en Hirak, una ciudad que en la mañana fue tomada de asalto por fuerzas oficiales con soporte de vehículos pesados para transporte de tropas”, informó la misma entidad.
En las proximidades de la capital, Damasco, las comunicaciones telefónicas habían sido cortadas desde la madrugada en Duma, mientras que se registraban fuertes tiroteos cerca de la sede de la Seguridad del Estado, a unos 20 kilómetros de la capital.
En una localidad vecina, Haraste, las fuerzas de seguridad arrestaron a varias personas.
Una vez más, los actos de violencia en Siria afectaron al vecino Líbano. Dos personas resultaron heridas por los disparos de una patrulla militar siria que entró a territorio libanés, próximo a la ciudad fronteriza de Khirbet Daud, dijo un funcionario libanés.
Entre tanto, la huelga convocada el domingo por militantes contrarios al régimen continuaba en Deraa, Homs, Hama, Idleb y Duma, informaron militantes locales.
En la red social Facebook, los militantes llamaron a los sirios a mantener el movimiento de desobediencia civil lanzado la semana pasada para aumentar la presión sobre el régimen de Bashar al Asad.
“La segunda etapa comenzó, vamos a cerrar nuestros teléfonos móviles durante cuatro horas en la tarde, bloquear las calles e ir a trabajar pero sin realmente trabajar”, publicó un militante para “cortar los medios financieros del régimen”.
“En Deraa, la huelga se mantiene por cuarto día consecutivo”, afirmó un militante a la AFP.
El Consejo Nacional Sirio (CNS), que reagrupa a la mayoría de las corrientes de oposición, formuló un nuevo llamamiento a la comunidad internacional a proteger a la población civil ante la violenta represión que según la ONU ya dejó un saldo de más de 5.000 muertos desde el mes de marzo.
“Los miembros del Consejo de Seguridad deberían discutir diferentes medios para proteger a los civiles. Deberían encontrar nuevos medios de hacerlo”, apuntó el portavoz del CNS, Basma Kodmani, en el sitio web del frente opositor.
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