Luego que el ministro de la Corte Suprema Adalis Oyarzún ordenara la detención preventiva del ex juez argentino Otilio Romano, detectives de Interpol Chile lo detuvieron en el balneario de Reñaca, en la Región de Valparaíso.
El ex magistrado figuraba en la lista de las 315 personas más buscadas por la Interpol a nivel internacional y su arresto era constantemente requerido desde Argentina.
Oyarzún había solicitado un informe en enero pasado al ministerio del Interior sobre la solicitud de refugio que hizo a Chile el destituido juez, pero luego que la cancillería argentina enviara el resumen de los cargos que se le imputan, el magistrado determinó pedir la detención de Romano y analizar su eventual extradición.
Tras su detención, el juez argentino será llevado ante el ministro Oyarzún, quien decidirá su deportación, sin embargo, aún puede apelar a la Sala Penal de la Corte Suprema.
El 15 de diciembre de 2011 un Jurado de Enjuiciamiento argentino destituyó a Romano por haber participado en 103 delitos de lesa humanidad, por no haber denunciado o investigado violaciones a los derechos humanos durante la dictadura del vecino país.
Pero un día antes de ser suspendido por el Consejo de la Magistratura, el ex juez escapó a nuestro país, donde solicitó refugio político y consiguió un visado de permanencia por ocho meses.
Hace algunas semanas, veraneantes argentinos en Reñaca tomaron fotografías del buscado juez caminando por el paso del balneario y de su posterior huída en un colectivo al percatarse que lo habían reconocido. Las imágenes causaron estupor en Argentina y reavivaron la solicitud de extradición.