La creación del servicio Iberia Express ha generado un extenso conflicto entre el sindicato de pilotos de esta empresa española. Los trabajadores alegan la vulneración de un contrato colectivo firmado con la compañía.
Iberia Express es un servicio de bajo costo para viajes de tramos cortos, al cual se opuso a su creación el sindicato de pilotos Sepla.
La aerolínea rechazó todas las propuestas de sus trabajadores para que la creación de la nueva línea se realizase con empleados de Iberia, y tampoco sirvió de nada que los pilotos ofrecieran rebajar su salario un cincuenta por ciento.
Esto, finalmente provocó que el sindicato realizara protestas y anunciara una huelga para el 13 y 16 de abril próximo y que la empresa cancelase vuelos a distintos lugares. Además, casi diez pilotos ya han sido despedidos por negarse a realizar viajes asignados.
Según el analista internacional y cientista político, Guillermo Holzmann, este caso “viene a ser una expresión del malestar que hay en España respecto a las medidas que ha tomado el gobierno, a la flexibilización del tema laboral, que todavía no lo aprueba el Parlamento, pero que sin embargo está en vigencia, y pasa a ser también una muestra más de los problemas políticos, sociales, y particularmente laborales que está enfrentando España para poder hacer los ajustes económicos y financieros que le ha pedido la Unión Europea”.
Iberia implementó el servicio a bajo costo para detener el aumento de las pérdidas en sus rutas a corto y medio plazo y volver a ser un grupo rentable, lo que podría traducirse en un ahorro de activos importante para el 2015.
Es por esto que la interpretación de los analistas apunta a que se está generando un clima de conflicto social que sirva de argumento para disminuir la planta de pilotos de la empresa de manera de adecuarse a la cantidad de trabajadores que necesitará para su nuevo formato.
“La aerolínea lo que hace es aprovechar toda la legislación para poder generar la cantidad de pilotos que realmente necesita aprovechando cualquier situación para despedir a aquellos que ya no son necesarios en virtud del nuevo modelo de negocios que tiene Iberia”, sostiene Holzmann.
El analista asegura además que estas medidas van en sintonía con las medidas del Gobierno español y con la autonomía que las empresas han recibido para su accionar.
El conflicto por el momento está en una crecida agudización, ya que el sindicato viene anunciando nuevas jornadas de huelga, lo que ha provocado la suspensión de más de 250 vuelos.