La diputada María Antonieta Saa y la vocera de la Coordinadora de Padres y Apoderados (Corpade), Dafne Concha, respaldaron a las alumnas del Liceo 7 que no han sido reincorporadas al establecimiento a causa de su participación en las movilizaciones estudiantiles del año pasado.

En el caso de esta escuela, son cinco alumnas las que presentaron un recurso de protección ante la Justicia, el que fue declarado admisible. Aun así, hasta ahora, el consejo de profesores es el que ha tomado esta decisión.

La diputada María Antonieta Saa exigió la reintegración inmediata de estas alumnas y responsabilizó al alcalde de la comuna de Providencia, Cristián Labbé, de impulsar una medida arbitraria y autoritaria.

“El profesorado no está tomando estas medidas. Alumnos de estos colegios que son prestigiosos y significan un cambio en la vida, están siendo frustrados y le castran todo su futuro por una medida autoritaria sin razones”, dijo la legisladora.

La parlamentaria explicó además, que estas expulsiones ni siquiera se han hecho con el argumento de la participación de las alumnas en las movilizaciones del año pasado. El caso de la estudiante Cristina Femenías, es un ejemplo, ya que ésta fue removida por otras causas.

En ese sentido, criticó duramente al alcalde Labbé por realizar una persecución a los estudiantes que protestaron, y defendió que a los establecimientos de la comuna conocidos como “emblemáticos”, se les niegue la matrícula.

“Me parece inaudito que un alcalde tenga un reino en Providencia. Él no es un edil, es un dictador absoluto que utiliza a los profesores que son honorables y que dependen de él para hacer esta persecución a los estudiantes que participaron en las movilizaciones. Muchos niños de mi distrito, Conchalí, Huechuraba y Renca tienen todo el derecho a estar en estos colegios”, afirmó.

Por su parte, Dafne Concha, dijo que hay autoridades que están actuando de forma tozuda, ya que hay estudiantes que si bien tienen matrícula, fueron incorporados de forma condicional.

Además, acusó a las autoridades del Liceo 7 de no estar garantizando el derecho a la educación de estas alumnas.

“Son muchos los niños que están pasando por esta situación. Llevan un mes y medio de clases que empezaron el 5 de marzo y los estudiantes están alejados de su colegio. Eso no solo indica que aquí las autoridades están haciendo abuso de su autoridad, sino que no están asumiendo su rol de liceo emblemático. La directora debería estar defendiendo el derecho a la educación de las niñas”, sentenció.

En dicho establecimiento, fueron expulsadas 12 niñas, de  las cuales cinco presentaron un recurso de protección el cual a pesar de ser declarado admisible, aún no cuenta con fallo de parte de la Justicia.

Similar es el caso del liceo Tajamar en donde también parte de las siete alumnas suspendidas realizaron una acción judicial.