Este jueves más de 200 estudiantes de la sede de Santiago de la Universidad del Mar se manifestaron en la comuna de Maipú para exigir al Gobierno que tome parte en las instituciones de Educación Superior privada, ante las irregularidades que denunció el ex rector de la casa de estudios, Raúl Urrutia.

La presidenta de la Federación de Estudiantes de la sede de Santiago de la Universidad, Susana Giacaman, aseguró que pese a la dificultad que tuvo la convocatoria se hizo un buen balance, y explicó que las demandas apuntan a que el Estado sea garante de la Educación Superior en todos sus aspectos.

“Es bastante difícil movilizar a los gente de los grupos de sectores privados, porque no existe cultura de movilizaciones como tal en la gran mayoría, así que consideramos que nos fue bastante bien, aunque esperamos contar con más apoyo a futuro. Contamos con todo el apoyo de la sede, pero no todos fueron a la movilización. Lo que nosotros pedimos es que sea el Estado quien sea garante de nuestra Educación y que se haga responsable si es que la universidad llegase a quebrar, ya que fue el Estado quien no se hizo responsable de regularizar ni fiscalizar lo que estaba pasando aquí”, sostuvo la dirigenta estudiantil.

Giacaman dijo que los problemas del sector privado no sólo se remiten a acreditación, fiscalización y control, sino que también debe concretarse el fin de la participación de la banca privada como financista y la garantización de la educación consagrada como derecho.

La Federación de Maipú se ha agrupado con distintas organizaciones sociales, estudiantes secundarios y con el Movimiento de Educación Superior Privada (Mesup), y aseguraron que seguirán movilizados “hasta que se escuchen las demandas de la educación en general”.

Por otra parte, estudiantes de Derecho y de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile participaron en una toma de la sede del Consejo Nacional de Acreditación (CNA), actividad en la cual el presidente del Centro de Estudiantes de Derecho, Esteban Miranda, dijo respaldar al movimiento de la Universidad del Mar.

“El caso de la Universidad del Mar le entrega completamente la razón al movimiento estudiantil, con datos mucho más sólidos, que siempre estuvo en lo correcto con las demandas del año pasado. Instituciones como esta, y toda la institucionalidad de educación, están podridas y no cumplen con el objetivo de garantizar calidad  ni buena educación de las instituciones que acreditan, sino que simplemente les ponen un timbre para permitirle, a través de sus inmobiliarias, lavar dinero, retirar dinero, defraudar a la ley y así lucrar con la plata que invierten las familias en la educación de los estudiantes”, indicó Miranda.

Sobre el tema también se pronunció el ministro de Educación, Harald Beyer, quien aseguró que el Mineduc podría pedir la revocación del reconocimiento de la casa de estudios, pero que está impedido de tomar acciones judiciales.

“En estricto rigor, la legislación no establece ningún tipo de querella, lo que establece es que nosotros podemos, a través de un decreto, pedir la revocación de reconocimiento oficial y eso lo tiene que sancionar, en definitiva, el Consejo Nacional de Educación, pero la legislación no contempla demandas judiciales de nuestra parte. Actores privados podrían hacerlo, pero nosotros como Estado no tenemos esa facultad”, manifestó Beyer.

Pero más allá de sanciones, los dirigentes mantienen las críticas al Ejecutivo que se han planteado desde el inicio del movimiento estudiantil, ya que se anuncian medidas de financiamiento sin atacar los problemas estructurales de calidad y lucro.

(foto: @la_fech)