Dibujos de arquitectos

  • 13-06-2012

Hace 10 días en un suplemento sabatino del principal matutino del país se  entrevistó a varios destacados arquitectos, pidiéndoles  que presentaran una visión futura de Santiago.

Todos los entrevistados hicieron planteamientos hermosos, ingeniosos y sensibles, ilustrando sus propuestas con dibujos, planos y collages. Este reportaje tuvo el mérito de hacer ver a los habitantes de la ciudad lo mal que estamos y lo bien que podríamos estar.

Pero, mientras estos arquitectos dibujan sus inspiraciones, los economistas  analizan el valor del suelo, el costo de la construcción y la plusvalía inmobiliaria. Mientras los arquitectos poetizan acerca de una ciudad del futuro, las empresas constructoras e inmobiliarias obtienen grandes ganancias destruyendo patrimonio y redes sociales, levantando negocios de 30 metros cuadrados más estacionamiento y bodega y tienen calculado cuántos metros cuadrados tienen reservados para seguir construyendo este tipo de ciudad que tanto les favorece.

Mientras los arquitectos se inspiran, las autoridades políticas hacen todos los esfuerzos, a veces de manera desembozada y poco elegante, para dar todas las garantías a las empresas constructoras e inmobiliarias para que sigan construyendo una ciudad fea y segregada. Lo peor es que estas autoridades disfrazan su acción bajo un disfraz activar la economía, fomentar la creación de fuentes de trabajo, y  por ayudar a los más pobres, todo enmarcado en  la idea del progreso

Sin duda que el aporte de una arquitectura y urbanismo de calidad mejorará las condiciones de vida de la población, especialmente de los más pobres. Por lo tanto, nos falta a los arquitectos superar el aporte basado solo en el dibujo. Es necesario situar el tema de la ciudad como un tema fundamentalmente político. Producto de lo anterior, lamentablemente tenemos una falta de liderazgo. No es casual que en casi 50 años de existencia del Ministerio de la Vivienda y Urbanismo, por un corto tiempo, solo una arquitecta haya sido ministra.

Por lo tanto, más que en dibujitos, los arquitectos deberíamos poner por escrito nuestros planteamientos acerca de la ciudad. Esa será la única manera de influir en la toma de decisiones, de las cuales ahora estamos lamentablemente ausentes.

Podemos avanzar en algunos planteamientos:

•             Demoler las viviendas sociales mal hechas

•             Una agresiva y profunda política de dotación de servicios en esos territorios excluidos de la ciudad

•             Incentivo para construcción de viviendas para clases medias en la periferia empobrecida

•             No más expulsión de pobres a la periferia

•             Todos los emprendimientos inmobiliarios deben tener un  % mínimo de vivienda social

•             Una política de Estado para destinar todas las propiedades inmobiliarias del fisco, en cualquier parte que estén localizadas, para vivienda social

•             Protección de patrimonio físico y de las redes sociales existentes

•             Una inteligente política de Espacio público; de Educación pública, gratuita y laica en todos los barrios; y de Transporte publico

En conclusión, superemos el dibujo, ya que es necesaria una mayor participación e influencia de los arquitectos en el desarrollo de nuestras ciudades y sociedad.

Podemos avanzar en algunos planteamientos:

  • Demoler las viviendas sociales mal hechas
  • Una agresiva y profunda política de dotación de servicios en esos territorios excluidos de la ciudad
  • Incentivo para construcción de viviendas para clases medias en la periferia empobrecida
  • No más expulsión de pobres a la periferia
  • Todos los emprendimientos inmobiliarios deben tener un  % mínimo de vivienda social
  • Una política de Estado para destinar todas las propiedades inmobiliarias del fisco, en cualquier parte que estén localizadas, para vivienda social
  • Protección de patrimonio físico y de las redes sociales existentes
  • Una inteligente política de Espacio público; de Educación pública, gratuita y laica en todos los barrios; y de Transporte publico

 

En conclusión, superemos el dibujo, ya que es necesaria una mayor participación e influencia de los arquitectos en el desarrollo de nuestras ciudades y sociedad.

 

�(:6p.7 �D, -family:Symbol;mso-fareast-font-family: Symbol;mso-bidi-font-family:Symbol’>·       Una inteligente política de Espacio público; de Educación pública, gratuita y laica en todos los barrios; y de Transporte publico

 

 

En conclusión, superemos el dibujo, ya que es necesaria una mayor participación e influencia de los arquitectos en el desarrollo de nuestras ciudades y sociedad.

 

El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no refleja necesariamente la posición de Diario y Radio Universidad de Chile.

Presione Escape para Salir o haga clic en la X