La SIAT de Carabineros entregó un informe pericial al Ministerio Público, donde detalla que el arquero de la Universidad de Chile, Jhonny Herrera, conducía su automóvil a 180 kilómetros por hora, minutos antes de atropellar a Macarena Casassus, en diciembre de 2009, accidente que terminó con resultado fatal para la joven.

El registro mide la velocidad con que el futbolista se desplazó por avenida Vespucio Sur en dirección al norte, entre los pórticos 5.4 y 5.2, a 4 kilómetros de la intersección de Avenida Ossa con Echeñique, lugar donde ocurrió el accidente.

La información fue solicitada por el Ministerio Público, una de las últimas indagatorias antes del cierre de la investigación. El fiscal de la zona Oriente, Francisco Lanas, declaró que esto confirma que el deportista conducía a exceso de velocidad, ya que al momento del impacto su vehículo registraba una velocidad de 91 km/h.

Herrera está formalizado por “conducción en estado de ebriedad con resultado de muerte”. La Fiscalía informó que llevará al jugador a juicio, por lo que arriesga una condena de hasta cinco años, pese a que su conducta previa le permitirá cumplirla en libertad.