Nacido desde su experiencia, la doctora en Lingüística y en Filosofía de la ciencia Natalia Fernández Díaz, se dio a la tarea de criticar al feminismo que se ha desarrollado en las dos últimas décadas.
Su reprobación nace porque considera que éste se ha institucionalizado aliándose con el poder que le entregan los hombres. Según la autora este movimiento se ha conformado con lo poco que se ha obtenido al respecto, como por ejemplo ser presidenta de una nación u ocupar cargos parlamentarios, así detalló la autora al programa Semáforo de nuestra emisora:
“Es una mirada crítica que coincide con mi recorrido personal, pero lo que ha ocurrido al menos en Europa estos últimos años, es que el feminismo se ha ido convirtiendo en un aliado del poder patriarcal, es decir que no ha podido con el enemigo y se ha sumado a él, con lo que ha dejado de tener mucho de lo contestatario y se ha convertido, más bien, en un movimiento muy cómodo y conformista”.
En el texto llamado “Cuando el feminismo dijo sí al poder”, se da cuenta de diversas formas de violencia que suelen pasar inadvertidas ante la audiencias, como es el caso de la moda, la imposición de la belleza desde el mundo empresarial y la hiper sexualidad con la que tienen que actuar en los medios de comunicación las mujeres, quienes siempre están en cargos más bajos que los hombres.
Según la también académica de la Universidad Autónoma de Barcelona, “en la cultura del todo vale, de la inmediatez de los logros y de la desmitificación del esfuerzo, ha supuesto una vuelta atrás en la conquista de los derechos de las mujeres”.
Vicios
Para modificar esta situación, la autora advierte que se tienen que llevar a cabo varios desafíos. El primero es una mayor educación de la sensibilidad masculina, replantearse las leyes de protección a las víctimas de violencia a las mujeres, y por último dignificar a las personas en su conjunto.
Natalia Fernández Díaz explicó que “se deberían replantear algunos puntos que han resultado tóxicos para las propias ideas del feminismo. Lo más importante es no perder de vista que la tarea de dignificar a las personas, atañe al grupo en su conjunto y no solamente a las mujeres. Creo que el feminismo al haberse enconado en esa idea que primero hay que dignificar a las mujeres y luego ya veremos, no ha hecho un favor a la idea de la igualdad”.
El libro de 113 páginas, publicado por Ediciones Radio Universidad de Chile reflexiona sobre los distintos puntos que hay que cambiar para mejorar la sociedad en que vivimos, además de hacer un llamado a que las mujeres tomen en serio la lucha por sus derechos.