En 2009, Naciones Unidas oficializó la conmemoración del “Mandela Day” cada 18 de julio, en tributo al nacimiento de Nelson Mandela, líder sudafricano que este jueves cumple 95 años.

Este año la celebración está marcada por la hospitalización de Madiba, quien fue internado el 8 de junio por una infección pulmonar grave, dando paso a especulaciones con su mejoría. Se ha confirmado un estado “crítico pero estable”, con positiva evolución al tratamiento según ha indicado su familia.

En los primeros homenajes públicos, este sábado el ex presidente Thabo Mbeki, sucesor de Mandela en la presidencia, indicó que visitó al ex mandatario, y su salud evoluciona positivamente, e incluso vaticinó que falta muy poco para ser dado de alta.

La insuficiencia respiratoria es parte de las consecuencias en su cuerpo, luego de 27 años de presidio. Su encarcelamiento se transformó en emblema de lucha contra el apartheid, proceso de segregación racial en Sudáfrica impuesto contra la población negra. Al salir de prisión, recibe el Premio Nobel de la Paz en 1993 y un año más tarde se convierte en presidente de Sudáfrica, liderando un proceso de reconciliación histórico en su lucha por los derechos civiles.

El embajador de Sudáfrica en Chile, Hilton Fisher, destacó que el proceso continúa, a casi veinte años de la ascensión de Madiba al poder, siempre en la memoria con los caídos en esta lucha.

Fisher apunta que “hoy ha pasado un tiempo de la democracia, y las cosas no han sido fáciles, pero mejor de lo que eran antes. La mejor manera de honrar a Mandela es no olvidar el dolor y la lucha que significó para tantos, y cómo salieron todos victoriosos”.

Por su parte, el diplomático chileno Jorge Heine, embajador de Chile en Sudáfrica durante el mandato de Mandela, destacó su prestancia a un proceso, sin arrogarse el poder en si mismo: “Su noción de que esto no era un tema político personal, pudiendo ser reelegido, dice no y se retira. Esto no es sobre su persona, sino por el país y la democracia”.

En otra arista, el analista internacional Pablo Jofré, destacó el legado político de un prisionero que supo liderar un proceso de pacificación, como alternativa para avanzar en derechos civiles.

“Hablamos de una figura carismática, con alcance regional y luego mundial. Cuando es liberado, se genera una situación política inusual, un hombre 27 años prisionero, que recupera su libertad y toma un llamado a la pacificación, entendió que se necesitaba una salida mancomunada”, dijo.

Nicolás Fuenzalida, director de Africa Dreams, apuntó a la homologación de la historia de Sudáfrica, y su influencia en los procesos políticos que se viven hoy en Chile y Latinoamérica.

Fuenzalida subraya que “son historias parecidas. Sudáfrica tiene minerales, comparten una desigualdad, una historia de independencia con sus países hermanos. La figura de Mandela debe inspirarnos a buscar líderes que busquen esa integración. Él fue un revolucionario, fue toma como opción la paz radical, y eso puede ser un referente para lo que hemos buscado”.

Si bien el gobierno desmintió las versiones de un “estado vegetativo”, hoy la salud de Mandela atraviesa un momento delicado. Desde el presidente de Estados Unidos, autoridades políticas y sociales de todo el mundo han manifestado preocupación por Madiba, cuyo cumpleaños es otro motivo para destacar su lucha por Sudáfrica y los derechos civiles en el mundo.

En el Congreso de nuestro país se realizará una ceremonia extraordinaria en homenaje a la figura de Nelson Mandela.