Hace algunas semanas se dio a conocer un estudio del Banco Mundial en el que se recomendaba al Estado de Chile crear una Subsecretaría de Recursos Hídricos y bajo su alero centralizar todo lo relacionado al agua dulce, es decir: glaciares, mediciones de calidad y cantidad de aguas, red hidrométrica, ríos, usuarios y derechos de agua, entre otros.

En la evaluación, que duró 8 meses y que consta de casi 90 páginas, el organismo internacional identificó los principales problemas en cuanto a la institucionalidad que hoy existe, en los que el financiamiento, la definición de políticas y los objetivos sectoriales son los principales inconvenientes de una administración pública que responde a más de 100 funciones, distribuidas en más de 40 organismos, situaciones que se podrían resolver mediante esta reforma legal.

En este sentido, la ministra de Obras Públicas, Loreto Silva, señaló durante la III Cumbre Internacional de Sustentabilidad Hídrica que se trata de un conjunto de soluciones a largo plazo, en la que se necesita generar acuerdo desde todos los sectores para alcanzar el éxito.

“El Banco Mundial propone una Subsecretaría porque entiende que eso tiene mayor relevancia política dentro del aparato del Estado para poder tener una supremacía de administración dentro de las otras organizaciones, porque en Chile existe una duplicidad de funciones en muchos organismos y hay falta de funciones en otros. Todas las labores de fortalecimiento de esta institucionalidad, no solamente en materia de proyecto de ley, tienen una carta Gantt que ha sido planteada al Banco Mundial y tiene un horizonte de aquí al año 2017”, explicó.

Sin embargo, a nivel de expertos y organizaciones, generar esta unión para dar vida al proyecto que se pretende presentar a comienzos de 2014 es complicado. Diversas organizaciones sociales y medioambientales alertan que con esta institución no se solucionará el problema central de los recursos de agua en nuestro país: la urgencia de su renacionalización.

Lucio Cuenca, Director del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA) insistió en que el grave problema en nuestro país es la privatización del agua, que hoy en día no es considerado como un derecho vital de todos los habitantes.

El Ingeniero en Geomensura recalcó que la creación de la Subsecretaría es producto de una petición del Banco Mundial, “que es el mismo organismo internacional que ha promovido en nuestros países la mercantilización del agua. Entonces acá, en el fondo, se quiere responsabilizar la crisis hídrica que hay en el país a la cuestión institucional y nosotros creemos que el fondo del problema es la privatización del agua”.

Para Rodrigo Mundaca, Ingeniero Agrónomo y secretario del Movimiento por la Defensa del Agua, Protección de la Tierra y Respeto al Medio Ambiente MODATIMA, es esencial debatir en torno a los derechos que los ciudadanos tienen sobre el agua.

Además, a su juicio “una Subsecretaría de recursos hídricos que no se plantee terminar con los instrumentos privatizadores de las aguas, recuperar la propiedad colectiva y la gestión comunitaria, el carácter público de las aguas y su consagración  como derecho humano, estableciendo prioridades de uso, la verdad es que todas estas iniciativas, ya en la parte final de un gobierno de derecha como este, son simples voladeros de luces que no contribuyen a cambiar un ápice el estado actual de las cosas”.

De este modo, se vuelve a poner en agenda la discusión sobre la renacionalización de recursos naturales, donde el agua se configura como un derecho irrenunciable para la vida de las comunidades, sostienen los expertos.