“Hay distintos tipos de pérdidas”, inició la conversación el dramaturgo Juan Pablo Miranda sobre su opera prima teatral. El montaje que lleva por nombre “Duelo” reflexiona sobre la culpa, la pérdida y el destino en una sociedad “que no es capaz de decirse las cosas a la cara”, insiste el actor.
Son tres escenas que transcurren en un costoso café del centro de la ciudad, donde se reúnen dos compañeros de trabajo, Nelson y Natalia, a reconstruir los acontecimientos que terminaron con la muerte del hijo de ésta última tras un accidente ciclista.
A través de diálogos fuertes y emotivos se cuestiona la manera con que la sociedad obliga a comportarse en aquellas situaciones, y la diversidad de conceptos de familia que existen actualmente. Así asegura el director del montaje, Juan Pablo Miranda, quien explicó que “hay nuevas formas de familias donde las madres tienen que trabajar porque no tienen una figura paterna que las ayude, entonces los hijos crecen con las abuelas, es decir que la maternidad no es sólo de una forma, por ejemplo a esta madre le tocó dedicarse al trabajo para que a su hijo no le faltara nada, pero finalmente le terminó faltando ella”.
Según el actor “en la obra hay una madre con duelo en dos sentidos: primero, en el sentido más lógico que es la muerte del hijo; y segundo, en la deuda de esta mujer que siente que no se alcanzó a configurar como madre”.
Obra Duelo
Reconstruir la historia
En “Duelo” también se pone de manifiesto “la enajenación o arribismo con que el resto de las personas actúan ante estos acontecimientos tan adversos”, aseguró la protagonista del montaje junto a Sebastián de la Cuesta, Carolina Jullian.
“En relación a ello, esta madre busca encontrarse con su propio dolor y no reflejarse en los otros”, explicó la actriz. Y agregó que “eso es lo que busca este personaje, poder encontrarse con sus propias imágenes, con su propio dolor, tocarlo en carne propia y no reflejarse en los otros. Eso es lo que sucede en el país, pues como ser humano e individuo cuesta mucho indagar en nuestro propio dolor”.
Cada una de las instancias de reunión de estos compañeros de labores es musicalizada por la cellista Ángela Acuña, quien “es un personaje más de la obra”, dijo Miranda. La intérprete está siempre en el café amenizando la estadía de los consumidores. Según el director “la música en vivo hace que la puesta en escena entera adquiere vitalidad”.
“Duelo” se presentará hasta el 10 de agosto, con funciones los días jueves a las 20:30 horas, y los viernes y sábado a las 22 horas en el Teatro del Puente, ubicado entre los puentes Pio Nono y Purísima. La entrada es de $5000 general y $3000 estudiantes y tercera edad.
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