Ante la negativa de la Corte Suprema de revisar y anular fallos de Consejos de Guerra de la dictadura, que implicaron prisión, tortura, muerte y desaparición de chilenos, el año 2005 un grupo de ex oficiales de la Fuerza Aérea, presentaron una demanda por denegación de justicia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Dicha acción ha avanzado rápidamente en los últimos meses y, muy probablemente, pase a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, donde el Estado chileno arriesga fuertes sanciones.
Ante este cuadro, los demandantes se reunieron este martes con el ministro Hugo Dolmetch, actual vocero del máximo tribunal de nuestro país.
El ex comandante de la Fuerza aérea, Ernesto Galaz, quien fue torturado en la academia de guerra de la FACH, señaló luego del encuentro que este fue protocolar, puesto que hace muchos años la justicia chilena se negó a actuar en estos casos.
““No, porque la justicia chilena hace ya mucho tiempo que le negó justicia a nuestro caso. Si se negó justicia está pendiente y lo solucionan organismos internacionales. Hemos venido en orden protocolar a informarle al ministro lo que estamos haciendo, nada más, sin ninguna esperanza de que la justicia chilena haga algo”, aseguró.
Su compañero de armas, Mario González, comentó que el Estado se negó hace años a una solución amistosa y por lo mismo cree que la resolución marcará un precedente histórico.
“Esto va a tener repercusiones históricas en el continente latinoamericano. Es primera vez que se presenta un caso de estas características en la Comisión de Derechos Humanos. Va a marcar un precedente histórico, eso lo pude palpar y me lo dijeron abogados que trabajaron en la admisibilidad de este caso en la comisión”, señaló.
El ex senador, Carlos Ominami, cuyo padre fue víctima de los consejos de guerra, afirmó que Chile arriesga una condena bastante seria.
“Estuvimos una hora con el ministro Dolmestch, que tuvo realmente una muy buena disposición y una muy buena acogida, él tomó nota de esta situación, hizo algunas sugerencias desde el punto de vista legal y los abogados van a analizar su procedencia, pero la verdad es que nosotros venimos aquí sobre la base de que sentimos que la justicia chilena no fue capaz de resolver el problema. Y el Estado de Chile está arriesgando algo que es bien delicado, que es ser condenado por la justicia internacional por la denegación de justicia”, relató.
Cuando los 12 firmantes de la petición de anulación de los juicios de consejos de guerra acudieron ante la Corte Suprema, se les respondió que esta no tiene jurisdicción, para resolver sobre tiempos de guerra y por lo mismo optaron por acudir a organismos internacionales.