El viernes pasado se realizó la última reunión entre dirigentes sindicales y la administración de la Fundación Integra, entidad privada dependiente de la primera dama de la nación, cuyos jardines infantiles no abren hace 14 días, producto de una huelga legal.
En dicho encuentro, las posiciones no se acercaron.La paralización se debe principalmente a demandas de mejores remuneraciones para el personal de los recintos parvularios.
La distancia es tal que desde el martes 8, seis funcionarias de la región del Bio Bio iniciaron un ayuno, producto del cual dos de ellas sufrieron problemas de salud, por lo que debieron ser atendidas en el Hospital Regional, del que ya salieron.
Marcela Meza, dirigenta provincial y ayunante, por medio de Radio Universidad de Chile, llamó a Cecilia Morel a intervenir en el conflicto.
“Nosotras emplazamos directamente a la señora Cecilia Morel que es la presidente de nuestra Fundación y esposa del Presidente de la República, a que tome cartas en el asunto y se solucione este conflicto. Son ellos los responsables de esta situación, de que las familias de la Fundación no estén siendo atendidas, de que los niños no estén recibiendo alimentación y que seis de sus funcionarias estemos en huelga de hambre”, afirmó.
Rosa Huernao, presidenta del sindicato Numero 1 de Integra, comentó a nuestra emisora que su petición es sólo tener un aumento salarial similar al que han tenido los jefes del servicio.
“El promedio que tiene la gran mayoría de los trabajadores de Integra es de 300 mil pesos, versus las jefaturas que les subieron un 10% y ya ganaban arriba de un millón de pesos. Y está entrampado también en el tema el coeficiente técnico, que tiene que ver con la carga laboral y que repercute significativamente en la atención que le podemos brindar a nuestros niños”, señaló.
Radio Universidad de Chile intentó infructuosamente obtener la versión del Director ejecutivo de Fundación Integra, Sergio Dominguez, a quien las dirigentas sindicales acusan de actuar con intransigencia.