El líder norcoreano Kim Jong-Un decidió darle la bienvenida al año nuevo con una advertencia.
“Si estalla de nuevo una guerra en esta tierra, traerá consigo un desastre nuclear masivo, y Estados Unidos nunca estará seguro”, sostuvo en un mensaje difundido por la televisión nacional.
“Estamos ante una situación peligrosa, en la que un pequeño incidente militar accidental puede llevar a una guerra total”, recalcó.
En su mensaje de año nuevo, el líder del último régimen estalinista se refirió a la reciente ejecución de su tío y mentor Jang Song-Thaek, quien fuera uno de los responsables más influyentes del régimen.
“El año pasado nuestro partido tomó con resolución medidas para limpiar (…) la basura que había en su seno”, afirmó Kim Jong-Un.
Esta purga “ha contribuido en buena medida a consolidar la unidad del partido y la revolución”, agregó en la primera alusión pública a su tío desde la ejecución de éste.