En una nutrida conversación con la periodista Vivian Lavín, en el marco del ciclo de entrevistas del programa Vuelan las Plumas, Bañados relató las circunstancias en que puso en marcha lo que califica el “ideario de un idiota”, por aceptar la propuesta de Genaro Arriagada de ser parte de la franja del “No” previo al plebiscito de 1988.

El recordado rostro de televisión hizo un análisis sobre el contexto político y social que paradójicamente lo transformó en uno de las figuras con mayor credibilidad en el espacio público, el mismo en que no pudo trabajar por negarse a leer noticias a favor de la dictadura y el mismo del cual fue desechado por los creadores de la franja que lo hiciera famoso.

“El problema empezó mucho antes que la franja del NO, que por supuesto es lo que la gente más recuerda, pero es la culminación de algo que decidí por mi cuenta, sin respaldo político, de oponerme a la dictadura. Soy la única persona de la televisión que se opuso a la dictadura, y lo pagué muy caro”, indica el periodista.

En la ocasión, Patricio Bañados también destacó el desplazamiento de la línea editorial de los medios de comunicación en tiempos de post dictadura. “Los movimientos sociales y los estudiantes han tenido que decirle a la clase política cuál es la realidad del país” señaló el locutor que trabajó para importantes medios como la BBC de Londres y Radio Suiza Internacional.

El comunicador señala que “esta es la mayor vergüenza para la clase política. Y luego de veinte años se han puesto como temas de discusión aquellos asuntos que los políticos ignoraron completamente, viviendo en Versalles. Han sido los pescadores artesaneles, los estudiantes, los que han puesto sobre el tapete los temas esenciales para esta sociedad”.

Bañados explicó que el libro relata su trayectoria, pero principalmente se enfoca en cómo las circunstancias políticas afectaron su vida como ciudadano “sin contactos políticos, ni otro deseo de vivir en paz y hacer bien su tarea de cada día”, puntualizó.

Por último, el autor evitó criticar el actual ejercicio de las comunicaciones y señaló que más bien se debe cuestionar la frivolidad de quienes mandan en el periodismo en Chile.