El presidente del Partido Socialista, Osvaldo Andrade, llamó a tener “altura de miras”, en referencia al protocolo de acuerdo alcanzado entre la Nueva Mayoría y la Alianza, agitando el debate sobre las indicaciones que serán incorporadas al proyecto de Reforma Tributaria.
El diputado sostuvo que el acuerdo mantiene los cuatro ejes fundamentales del proyecto y es un “paso fundamental para la reforma a la educación”.
Asimismo, hizo hincapié en que fue una estrategia acordada por el comité político y responde a un “uso adecuado de la mayoría” que tiene el Gobierno en el Congreso: “No se pueden demonizar los acuerdos, son parte de la realidad cotidiana. Por tanto, su demonización es un error político grave. Descartamos de plano el regreso a la política de los consensos”, dijo.
Andrade también fue autocrítico ante la falta de información que reclamaron los sectores minoritarios de la Nueva Mayoría, específicamente, respecto de las críticas del Partido Comunista. También reiteró que hay un compromiso de inclusión en la redacción y tramitación de las indicaciones que serán discutidas durante el tercer trámite legislativo en la Cámara de Diputados.
El dirigente sostuvo que “esto maduró en el Senado, gracias a lo que hicimos en la Cámara de Diputados” y agregó que fue una estrategia que se conversó explícitamente en la instancia. A futuro, dijo, será “lo más institucional posible”.
“Entiendo que nadie pretende que estas cosas se conversen en el círculo central del Estadio Nacional, ante 80 mil personas, porque probablemente nadie entendería nada y el diálogo sería completamente de sordos. Hay una dimensión de esta tarea que expresa un formato, que tiene que ser institucional, pero que tiene que tener ritualidades”, afirmó.
Son varios los diputados de Renovación Nacional que cuestionaron el acuerdo tributario alcanzado entre oficialismo y oposición, asegurando que el proyecto aún afectará a las pequeñas y medianas empresas y la clase media.
Por el contrario, el parlamentario Gaspar Rivas (RN) estimó que “este acuerdo beneficia demasiado a muchas empresas que no son pymes”.
“El concepto de pyme que tienen es demasiado amplio”, replicó el único diputado de la Alianza que aprobó en general la Reforma Tributaria: “Se les pasó la mano en subir de 50 mil a 100 mil UF de facturación anual”, dijo en relación al espectro en que no podrá incidir la reforma.
Respecto al acuerdo, Rivas afirmó que es parte de una estrategia que viene del gobierno anterior: “Prueban fuerzas en la Cámara de Diputados y logran los acuerdos en el Senado”, criticó.
“Creo que ocurrió lo mismo. Es posible que responda incluso a una estrategia política de mostrar primero las garras y los dientes en la Cámara y luego bajar la guardia y ceder un poco, lo que harán ahora y muchas otras veces en el futuro, en el Senado”, advirtió.
Son varias las modificaciones al proyecto original y duras las críticas al interior de la coalición oficialista por la forma en que se fraguó el protocolo de acuerdo para la Reforma Tributaria.
Si bien la iniciativa legislativa vuelve a la comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, el equipo ministerial trabaja en el ingreso de una sola indicación que contemple distintos numerales, reduciendo las posibilidades de los parlamentarios de intervenir en el texto final.
Reformas pendientes
El diputado Osvaldo Andrade también se refirió a la discusión sobre las modificaciones al binominal que se retoma este martes en la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados: “No hay que entrar en los detalles y contenidos de las conversaciones, porque nos interesa mantener el diálogo”, dijo en relación a nuevas tratativas con la Alianza.
Sobre la Reforma Educacional, Andrade se limitó a responder que “hay diferencias al interior de la Nueva Mayoría que hay que resolver”.