“Para obtener una amplia cosecha, los fertilizantes de Chile con Nitrato de Sodio”. Esa frase se lee en uno de los afiches que circularon en Turquía para promocionar las bondades del salitre chileno, en el marco de la campaña de difusión que las compañías mineras y el Estado desarrollaron entre 1890 y 1960.

El salitre llegó a representar el 56 por ciento de los ingresos fiscales del país, pero su industria no era estable. Por eso, en 1894, las compañías extranjeras decidieron financiar una campaña de promoción sobre los beneficios del mineral y crearon en Iquique la Asociación Salitrera de Propaganda.

La institución fue reformulada en los años siguientes, el Estado tuvo distintos niveles de protagonismo, pero el objetivo siempre fue el mismo: aumentar las ventas a través de la promoción del mineral.

En la víspera de la Primera Guerra Mundial, por ejemplo, 17 delegaciones trabajaban en 29 países como Alemania, Bélgica, Holanda, Estados Unidos, Egipto y Rusia, además de colonias británicas y los territorios franceses en Argelia.

Afiche difundido en Bélgica.

27 afiches que formaron parte de esa campaña acaban de ser reeditados por el Archivo Nacional bajo el nombre Imágenes del salitre, volumen que fue publicado por primera vez en 1998 y que va en su tercera edición. En esta ocasión, las láminas fueron restauradas y acompañadas por una reseña del historiador Juan Ricardo Couyoumdjian.

De acuerdo a Osvaldo Villaseca, director del Archivo Nacional, “toda la difusión que se hizo a través de estos afiches fue el vehículo a través del cual Chile, por primera vez, se da a conocer al mundo. Seguramente, muchos países del Medio Oriente y Europa del Norte no tenían idea que Chile existía. A partir de estos afiches, Chile tuvo la oportunidad de posicionarse en el mundo con la difusión del salitre”.

Calendario que circuló en Australia.

El Archivo Nacional posee casi 200 álbumes, con cerca de una decena de afiches cada uno. Éstos eran elaborados tomando en cuenta elementos típicos de los países a los que se destinaban y, en ocasiones, con ayuda de ilustradores locales.

De todos modos, los carteles eran parte de un plan más amplio, que incluía otras acciones de propaganda, como concursos y conferencias. “Son testimonios muy valiosos para la historia de la minería y, en particular, del salitre. Son relevantes en un país que tiene una gran tradición minera, lo que ha significado un aporte importantísimo para el país. Esta difusión no se hizo solo con láminas, sino que además con cómics, lápices, discos y otros elementos”, destacó Osvaldo Villaseca.

Afiche difundido en Argentina.

Imágenes del salitre se encuentra disponible a través del Archivo Nacional y el material se puede encontrar también en el sitio salitredechile.cl.